¿Buscas algo diferente para tu boda?

Como fotógrafo de boda veo ceremonias y lugares de celebración de todo tipo.

He asistido a bodas en una iglesia, en un salón. He visto alquilar una masía para el evento, u organizarlo en un lugar que se salía de lo habitual, de lo establecido. ¡Las opciones son infinitas!

Te contaré la historia de una pareja que se casó en un lugar diferente. Al menos para mí.

Sophie y Christian, cuando los ves, transmiten una sensación de libertad que rezuma por todos los poros de su piel. Les gusta romper moldes. Su boda fue algo más de lo mismo. Un desafío a lo convencional.

Nos sorprendieron llevándonos a un lugar de la costa. Con vistas al mar. Sobre un acantilado donde se practicaba parapente. ¡De ahí salieron unas fotos espectaculares, naturales, sin posado!

El espacio era al aire libre. Una zona cubierta con una carpa daba sombra a quién la buscase, el resto descubierto. Bancos con mesas corridas sobre césped.

El día amaneció soleado. El cielo estaba de un color azul añil que contrastaba con el verde intenso de la hierba. Una brisa ligera refrescaba del calor.

Se contrataron dos tipos de cocina. Una de ellas se cocinaba sobre la marcha, en el mismo lugar donde se celebraba el evento, con productos típicos de la zona y comida de la de toda la vida. Otra elaborada con productos delicatessen y gourmet. Había para todos los gustos.

Una jueza, amiga de la novia, ofició la ceremonia. Los padrinos fueron el hermano y la hija.

La música sonó en vivo. Durante la comida se escuchó música de la región. Y por la tarde, un dueto amenizó con canciones variadas.

Al atardecer hubo grupos de invitados que se sentaron a ver la puesta de sol. Al anochecer los autobuses esperaban a los invitados para llevarlos de vuelta.

Espero que esta historia te haya ayudado un poquito.

Si deseas que fotografíe tu boda, tanto si es convencional como si es diferente, déjame tus datos y me pondré en contacto contigo.

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